Conocí a Liliane Zafrani poco después de llegar a París, en octubre de 2009. Su historia me pareció inspiradora. Éste es el relato de una compatriota que ha sabido abrir las puertas del éxito en el difícil mercado francés del arte.
Cuando Liliane
Zafrani comienza el día, contempla con una taza de café los cuadros
que exhiben las paredes de su apartamento en París. “Para mí, tener obras de
arte es vital; nunca me canso de ver las que tengo conmigo”. Seguramente ha
sido esa pasión, unida a su carácter disciplinado y riguroso, la base que le
permitió inaugurar hace unos doce años, en el histórico barrio parisino del Marais,
una galería de arte, el Espace Meyer Zafra, hoy una importante referencia de la
vanguardia latinoamericana del arte cinético en la capital francesa.
La
especialización en arte cinético llegó, en parte, por sus contactos con los maestros
Jesús Soto y Carlos Cruz-Diez. “El maestro Soto me dijo un día: ‘Usted debería
dedicarse al arte cinético; a usted le gusta y sabe expresarlo’”. El artista
guayanés le confió, entonces, obras extraordinarias y fue ahí donde ella se dio
cuenta de que jamás podía mezclar estilos: “Me di cuenta de que tenía que ser
purista”.
Así llegó al
local que hoy ocupan las instalaciones del Espace Meyer Zafra, en el número 4
de la rue Mahler, en el cuarto
distrito de París. “Ésta fue parte de una prisión de mujeres durante la Revolución Francesa.
Cuando descubrimos las paredes de piedra, pensamos que no serviría para exponer
las obras, pero luego vimos que el efecto producido era fantástico”. Y así es.
Cuando uno entra a la galería, el espacio, aunque pequeño, parece aumentar en tamaño
y proyectarse en una constelación infinita de colores, geometrías y líneas
superpuestas sobre la rústica superficie iluminada por un sobrio conjunto de lámparas
bien dispuestas.
De Liliane
Zafrani, uno de los primeros detalles que llama la atención es su modo de
hablar: pausado, sin prisas, suave. Tal vez sea ésta una característica que
refuerza su personalidad emprendedora, constante, autoexigente. Y es que de
aquella estudiante del Colegio Francia de Caracas de los años sesenta a Madame
Zafrani, la galerista del Marais, hay una vida contada entre el
multiculturalismo de su ciudad natal, Casablanca, y sus orígenes sefarditas y
venezolanos. Educada en un ambiente bilingüe, con un pie en la cultura francesa
y otro en la criolla, decidió desde muy joven que quería abrirse paso en la
vida en la Ciudad Luz.
A finales de los
años setenta, estudió Idiomas en la
UCV y luego, ya en París, realizó estudios de literatura y
traducción en la Sorbona. Después,
por más de 20 años, llevó a cabo una larga carrera como funcionaria de la UNESCO hasta que decidió
dedicarse por completo a su trabajo en la galería. “Nunca hago dos cosas al
mismo tiempo; en realidad, no sé hacer dos cosas al mismo tiempo”, afirma.
Su mirada brilla
con intensidad cuando habla de su trabajo y de lo que significa. “El arte
cinético venezolano es el mejor logrado, el más fino. Representa una
investigación de toda una vida de varios artistas que lo han promovido con
mucha inteligencia y sin improvisar nada”.
Sin duda, para un
venezolano que conozca a Liliane Zafrani es emocionante conocer su historia y
su éxito, y cómo, en el inmenso cosmos de una ciudad efervescente y exigente
como París, ella ha sabido darle renombre a Venezuela gracias a nuestro arte y
a su talento.
“El arte cinético es la geometría equilibrada; la serenidad. Este arte nace en los años 50 en un movimiento que comienza en París. El arte cinético evoca un movimiento tridimensional, mecánico, con el ojo”. Liliane Zafrani
Imágenes del Espace Meyer
Zafra, consagrado al arte cinético fundamentalmente latinoamericano.
La galería
El Espace Meyer
Zafra abrió sus puertas en el año 2000. Ha representado a unos 17 artistas, entre
los que destacan los venezolanos Jesús Soto y Cruz-Diez. Desde 2007 hasta la
actualidad, la galería ha participado en la Feria de Arte de París. Del 5 de junio al 5 de
septiembre de 2010, el Espace Meyer Zafra presentó la exposición titulada Matilde Pérez, Paris retrouvé, con obras de esta importante artista cinética chilena. Entre junio y
septiembre de 2009, en asociación con la galería polaca Atlas Sztuki, el Espace
Mayer Zafra expuso en Lodz unas 100 obras cinéticas y geométricas abstractas.
Excelente artículo Ricardo, a pesar de haber estado en París recientemente, no conocimos la galería pero qué orgullo! Y además, bueno otra excusa para volver pronto.
ResponderEliminarSaludos,
Roberto Larreal
Respondo muy tarde tu mensaje (¡casi dos años después!). Espero que estés muy bien. Si vuelves a París, estamos a la orden. Un abrazo.
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